La ciudad de Arica sumó un nuevo tesoro a su ya rico patrimonio cultural. La Ministra de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, Julieta Brodsky, firmó el decreto que declara las Ruinas de la Iglesia, Hospital y Convento San Juan de Dios como Monumento Nacional, en la categoría de Monumento Histórico.
Las ruinas, ubicadas en pleno centro de la ciudad de Arica, corresponden a un complejo edilicio construido por el Virreinato del Perú, a mediados del siglo XVII, que ocuparon una manzana completa y constituyen los únicos restos visibles y superficiales que han sobrevivido del período colonial hispano.
“Estamos muy contentos en que finalmente la Ministra Julieta Brodsky haya firmado este decreto donde se nombra a este patrimonio de la ciudad como Monumento Histórico. Estamos hablando de vestigios del pasado colonial de Arica, un testimonio casi único dentro de una ciudad que por los constantes movimientos telúricos, ha debido reconstruirse sucesivamente. Por lo tanto, esperamos que esta denominación contemple un programa de salvaguarda y difusión de este monumento histórico para el conocimiento y cuidado por parte de nuestra comunidad”, señaló Kateryn Garzón, Seremi de las Culturas, las Artes y el Patrimonio.
Los elementos que se conservan son muros de un metro de espesor, construidos en una técnica mixta de piedra sillar y bolones irregulares. Los muros laterales alcanzan una altura de 6,4 metros de alto con vanos abovedados. Además, el ábside tiene una geometría poligonal de 5 caras y un vano. Todos estos muros dan cuenta de un edificio de 11 metros de ancho y 54 metros de largo.
El secretario técnico del CMN, Erwin Brevis, destacó que con esta declaración se concederá protección efectiva a los únicos restos visibles y superficiales que han sobrevivido del período colonial hispano de Arica, “y además se podrá establecer que las nuevas construcciones en los lotes que incluyen las ruinas, implementen un procedimiento preventivo respecto a los componentes arqueológicos presentes en el subsuelo”.
La declaratoria contó con el apoyo de la Municipalidad de Arica, cuyo Edificio Consistorial contiene restos de los cimientos de este complejo edilicio, por lo que se establecerá una mesa de trabajo que incorpore actores públicos y privados para poner en valor este nuevo Monumento Histórico de la Región de Arica y Parinacota.