El alcalde Gerardo Espíndola firmó una declaración pública y se sumó a un grupo de cincuenta alcaldes y alcaldesas que solidarizan con la Agrupación Nacional de Empleados Fiscales (ANEF) y con los funcionarios públicos de organismos y servicios centralizados del Estado que se ven afectados por las insensatas medidas adoptadas por el Gobierno de turno.
En la misiva, los jefes comunales señalan que su “primer compromiso es el cuidado de la salud” y el bienestar de todos aquellos que viven bajo su administración y principalmente de los funcionarios públicos. Por lo anterior, rechazan este “intento forzado de retornar a la normalidad”.
Los alcaldes y alcaldesas también rechazan la “absurda imposición del retorno a clases y la posibilidad de reabrir los centros comerciales justo en el tiempo en que está proyectado el pick de contagio”.
Trabajo remoto
Además, informan que “mientras la pandemia que enfrentamos no esté bajo control, la modalidad de trabajo remoto, con turnos éticos esenciales y rotativos, se mantendrá en todas las dependencias de nuestras municipalidades, servicios traspasados y Corporaciones Municipales”.
A pesar de las dificultades que implica la modalidad de trabajo remoto, este se ha cumplido de buena forma y ha contribuido a llevar tranquilidad a nuestros colaboradores y sus familias, “con lo que podemos dar plenas garantías de la continuidad de nuestros servicios, pero manteniendo en primer lugar el cuidado de la salud de las personas y de nuestros trabajadores y trabajadoras”.
Los ediles aprovecharon de reiterar las medidas de autocuidado (lavado de manos, uso de mascarilla y distanciamiento físico) a los funcionarios públicos que permanecen en sus puestos de trabajo y para los chilenos y chilenas que ante la falta de ayuda y la compleja situación económica, están impedidos de quedarse en casa y deben seguir trabajando.
Cuarentena total
Llamamos a nuestros vecinos a quedarse en sus casas, y al Gobierno le reiteramos la solicitud de cuarentena total, sobre todo después de las significativas diferencias que muestra la evolución de la pandemia en comunas con cuarentena (8 por ciento aumento de casos) y sin cuarentena (80 por ciento aumento de casos).
Nos parece que seguir corriendo detrás de la pandemia y forzar el retorno a la normalidad económica como quiere este Gobierno, puede constituir un error fatal, cuyo costo lo pagarán nuestras vecinas y vecinos.
Mientras la pandemia siga afectando la vida de todas las chilenas y chilenos, reiteramos la necesidad de un mayor esfuerzo fiscal para ir en ayuda de las familias que más lo necesitan, mediante una Renta Básica de Emergencia de carácter universal.
Por último, los ediles reiteraron la necesidad de poner fin al secretismo, y actuar con mayor rigurosidad y transparencia, para que se establezca una relación de coordinación y cooperación entre los distintos niveles de Gobierno.