Con el objetivo de resguardar la salud y seguridad de niños, adolescentes y jóvenes que comenzaron desde esta semana su regreso a clases, fiscalizadores de la Seremi de Salud de Arica y Parinacota continúan inspeccionando librerías y tiendas comerciales de venta de artículos escolares, con especial énfasis en lápices de colores, crayones, temperas, plasticinas y silicona líquida, entre otros productos que pudieran ser nocivos y peligrosos para algunas personas.
Así lo dio a conocer la Seremi Claudia Torrealba, quien supervisó en terreno el proceso junto al fiscalizador y encargado (s) de la Unidad Técnica de Salud Ambiental, Carlos Olivares.
“El espíritu de esta fiscalización está en plena sintonía con lo mandatado por nuestro Presidente Sebastián Piñera, en cuanto a velar por la salud de la población y especialmente la de nuestros niños. Es por eso que estamos en terreno constatando que los útiles de uso escolar se encuentren dentro de la normativa”, expresó la autoridad, tras realizar una inspección en la distribuidora Romech, ubicada en el centro de la ciudad de Arica.
Torrealba agregó que los artículos escolares sólo deben ser adquiridos en establecimientos autorizados para garantizar la inocuidad de los productos, y por ende, la salud de las personas.
Carlos Olivares, explicó que en la práctica se constata el cumplimiento del decreto N° 374/97, que establece el límite máximo permitido de plomo en pinturas, principalmente en artículos como lápices de colores, crayones, temperas y plasticinas, las cuales no pueden superar los 600 ppm (mg/kg) de plomo en su composición.
En el caso de la silicona líquida que contiene solventes orgánicos, que lleva la leyenda “Úsese en ambientes ventilados” y “la inhalación frecuente y prolongada de este producto genera daños irreparables a la salud”, el fiscalizador subrayó que este no constituye un artículo escolar ya que tiene un riesgo para la seguridad de los niños. Por lo tanto, su venta a menores de 18 años está prohibida por ley”.
“Tampoco se deben utilizar adhesivos como útiles escolares que contengan en su composición tolueno, benceno o metanol, ya que estos son altamente tóxicos para los niños. Ante su hallazgo, la Autoridad Sanitaria debe retirarlos del mercado”, precisó el fiscalizador.