Con motivo de la celebración adolescentes y funcionarios festejaron un nuevo cumpleaños con diversas actividades de convivencia y juegos lúdicos, bajo estrictos protocolos sanitarios
En la actualidad son 31 adolescentes que integran las Residencias Familiares de administración directa de Mejor Niñez en Arica y Parinacota, quienes fueron derivados por el Tribunal de Familia debido a vulneraciones sufridas.
Cada uno de ellos cuenta con acompañamiento terapéutico, así como también para sus familias, articulación con redes de protección y residencialidad emocionalmente segura, pilares fundamentales de este modelo familiar que apunta a la protección y desarrollo integral de los jóvenes.
Además, las residencias cuentan con profesionales de diferentes áreas, tales como: terapeuta ocupacional, psicólogo, tens, abogado, trabajador Social, entre otros, quienes a diario dan respuestas y apoyo a cada una de las necesidades de los adolescentes que allí se encuentran, propiciando el sentido de la pertenencia, el desarrollo de la autoconfianza y afectos que les ayuden a generar sus propias opiniones y buscar alternativas que den respuesta y soluciones a sus problemáticas. Así como también, se trabaja en intervenciones psicosocio-educativas y terapéutica que apuntan a la educación para la vida en sociedad, preparación para la vida independiente, fortalecimiento de recursos personales, entre otras intervenciones.
La ceremonia fue liderada por la directora regional de Mejor Niñez, Elizabeth Salinas Robles, quien en sus palabras enfatizó que este tiempo de pandemia ha sido un periodo emocionalmente complejo para los jóvenes, pero también que pone nuevos desafíos para fortalecer el trabajo de Mejor Niñez en la región.
“Los funcionarios de las residencias están comprometidos con el trabajo de apoyar a los adolescentes y a dos años de funcionamiento esta labor se ha fortalecido, impactando en forma positiva en el quehacer de los jóvenes”, dijo la directora regional de Mejor Niñez.
Agregando que “esperamos seguir retroalimentándonos de nuestro trabajo con los jóvenes, pues la realidad de los adolescentes es dinámica, lo que no obliga actualizarnos. Como Mejor Niñez nos sentimos orgullosos de como los jóvenes avanzan, cumplen con sus objetivos y nos visualizan como un referente de protección. Tenemos mucho por recorrer, sin embargo, la región se encuentra encaminada a entregar una atención de calidad y efectiva”.
En sus palabras finales, la directora destacó el rol fundamental de este modelo residencial, que está centrado en promover, proteger y restituir los derechos de los niños, niñas y adolescentes, en un ambiente familiar que les proporciones rehabilitación, protección y seguridad, permitiéndoles así una mayor inserción social.