El programa de la Fundación Acrux finalizó con la certificación de los últimos 30 capacitados
En total fueron 325 los beneficiados con la iniciativa que formó parte del proyecto “Cuidado Mayor para un bien mayor”, ejecutado por la Fundación Acrux.
En el marco del proyecto “Cuidado Mayor para un bien mayor” ejecutado por la Fundación Acrux, con el financiamiento del Gobierno Regional de Arica y Parinacota, con el apoyo del Consejo Regional a través de Educación Continua de INACAP, se realizó la certificación de los últimos 30 beneficiarios del curso “Cuidados y Facilitación Geriátrica Domiciliaria”, que promueve a Arica como una ciudad ideal para las personas mayores que buscan mejorar su calidad de vida en la tercera y cuarta edad.
En ese sentido, el proyecto relevó la importancia de envejecer mediante estrategias tales como el telemonitoreo a las personas mayores de 65 años, alfabetización digital para facilitar su relacionamiento y el curso de cuidado presencial para 325 personas, quienes fueron capacitados para mejorar el cuidado de sus familiares.
El gobernador regional de Arica y Parinacota, Jorge Díaz Ibarra sostuvo que “Arica es una ciudad que invita a las personas mayores a disfrutarla, no sólo por sus condiciones climáticas, sino también por las propias formas de vida que tiene la región. Por lo tanto, es primordial apoyar iniciativas como ésta, que promuevan el cuidado de los adultos mayores y el envejecimiento activo. Debemos liderar un proceso que permita a nuestros mayores tener una mejor vejez”.
Por otro lado, Andrea Betanzo, directora del Programa de Personas Mayores de Fundación Acrux, mencionó que el curso tuvo una duración de un mes y una semana aproximadamente, tiempo en el que se abordaron una serie de módulos relacionados con la adultez mayor y su autovalencia en el tiempo. “Llamo a la ciudadanía a poder tocar la puerta del Gobierno Regional de Arica y Parinacota para que puedan seguir ayudándonos, porque ya tenemos pensado de forma visionaria seguir con el proyecto, no dejando de lado a ningún adulto mayor que haya participado para poder mantenerlos en compañía y seguir formándolos. Estamos seguros de que no hay un límite en el tiempo para conocer cómo formar calidad de vida”, dijo.
El consejero regional y presidente de la Comisión de Adulto Mayor del Consejo Regional, Claudio Acuña valoró la iniciativa. “Estamos muy contentos porque esto está dentro de las etapas que queremos ir construyendo para terminar con una región que realmente se preocupa y atiende a sus personas mayores con dignidad. Son más de 300 personas las que decidieron tomar este curso y gracias al financiamiento que hemos dispuesto como Gobierno Regional, Acrux e INACAP tomaron este desafío. Sin duda somos la región que más capacita a personas en cuidado geriátrico y por lo tanto estamos muy contentos, porque se está socializando una necesidad que es urgente, de cara al envejecimiento poblacional que está tomando cada vez más preponderancia”.
Más que un curso
Elisabeth Rossell, consejera del Servicio Nacional del Adulto Mayor (Senama) y dirigente fue una de las participantes del curso, al que calificó como “una iniciativa fantástica”, pues además de aprender, pudo compartir con otros beneficiarios de diversas edades. “Tengo unos maravillosos 70 años, la tecnología no es mi aliada, pero lo que agradecía a mi curso es que me ayudaron con un montón de cosas en la tecnología. Lo más importante es que aprobamos con buenas calificaciones y agradecemos a Fundación Acrux que hizo un espacio para el adulto mayor y a INACAP por abrir sus puertas”.
Eduardo Beltrán ha cuidado a varios adultos mayores en su vida; a su papá, su suegro y ahora a su mamá. Es por eso que no dudó en ser parte de un curso especial de cuidados geriátricos. “Hay cosas que uno no sabe, por ejemplo, la parte técnica. La experiencia de aprender, de ser capacitado, entrenado para cuidar a un adulto mayor es fantástico. Este es un programa que es recomendado para todos, porque algún día vamos a tener que llegar a esa instancia en nuestras vidas”, puntualizó.