Luego de sentir el fuerte sismo 6.3 Richter de hoy, unas 700 personas evacuaron desde el sector norte de la ciudad, específicamente los pobladores de las zonas costeras, los que se dirigieron hacía la zona de seguridad. Allí permanecieron hasta que se confirmó que no había alerta de tsunami y bajaron hacía sus domicilios en forma ordenada.
Se pudo observar a familias completas, incluidas sus mascotas, poniendo satisfactoriamente en acción su plan de emergencia para estos casos.
En terreno se logró ver a bomberos, carabineros, militares y efectivos de la PDI, quienes entregaban información y calma a las personas.
Llamó la atención que la mayoría de las personas tenían la sensación que fue más fuerte que 6,3 Richter.
Mientras esto ocurría en el sector norte de la ciudad, en las oficinas de la Onemi regional, se constituía el COE (Comité Operativo de Emergencia) quienes, junto con evaluar la situación y tomar las medidas, daban a conocer la realidad de la región luego del movimiento telúrico.