Ante la reciente acción de Bolivia a través de la Cancillería boliviana donde se confirma la solicitud a la Corte Internacional de Justicia de la Haya, que declare la demanda contra Chile “dentro de su jurisdicción”.
El diputado Socialista, Luis Rocafull, integrante de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara, se manifestó partidario de “tomar con bastante tranquilidad”, la reciente acción de Bolivia, que responde a la objeción preliminar presentada por Chile. Allí, se solicita al tribunal que declare que la demanda en la que se pide que se obligue a Chile a negociar una salida soberana al Océano Pacífico, está dentro de la jurisdicción de la Corte.
El legislador partió destacando que el trabajo que ha realizado Chile, a través de la Cancillería, “ha sido impecable”, al objetar la demanda del país altiplánico en Corte Internacional de Justicia (CIJ). “Tengo la confianza absoluta en la defensa del gobierno chileno. De manera que no me voy a hacer eco de las palabras de los agentes bolivianos, que incluso, pueden ser interpretadas como soberbias e inconducentes”, sostuvo el legislador por Arica.
El diputado Rocafull comentó que prefiere quedarse con el alto nivel de respeto demostrado por Chile, frente al derecho internacional. “De manera que tengo la plena confianza y la certeza de que la defensa chilena tendrá éxito, como lo ha planificado la Presidenta Michelle Bachelet”, destacó.
Además, el legislador PS dijo confiar “plenamente en la imparcialidad y objetividad”, de los miembros de la Corte Interamericana de Justicia y destaco la respuesta ha tenido a nivel internacional la acción del gobierno chileno.
De paso, Luis Rocafull afirmó que las “presiones” que estaría ejerciendo Bolivia hacia los jueces de la CIJ, “no tendrán ningún destino, por la alta investidura de los juristas. De manera que estoy seguro que estos van a actuar con objetividad y con el conocimiento pleno de los antecedentes”.
Entre esos antecedentes, el diputado Socialista destacó uno de los argumentos esgrimidos por Chile, que señala que los tratados internacionales son “inamovibles”. Dato que según destaca Rocafull, trasciende a los litigios que se tengan con Bolivia”. Y advierte que “de no respetarse este planteamiento, se sentaría un pésimo precedente para el resto de los países”, concluyó.