Ya son 8 años desde que un colectivo de ariqueñas y ariqueños amantes del cine documental trabajan activamente en la creación de espacios de encuentro y reflexión en torno a la no ficción cinematográfica: AricaDoc.
Juan Pablo Donoso, antropólogo audiovisual y director del Festival Internacional de Cine Documental AricaDoc, se da un tiempo en la exigente preparación de la octava versión de esta actividad el que se lleva a cabo gracias al Programa de Apoyo a Organizaciones Culturales Colaboradoras (PAOCC) del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, y de la Ilustre Municipalidad de Arica.
¿Qué podemos esperar de esta octava versión?
Primero que todo, decir que como ya es habitual todas nuestras actividades son de acceso universal y liberado, así que les esperamos para compartir en torno a lo mejor del cine documental. Para este año tenemos un programa con obras de diferente origen y temática, grandes y pequeñas historias, todas las cuales, desde diversas formas y puntos de vista, exploran las complejidades de la experiencia humana en un mundo profundamente fracturado y en transformación.
¿Cuál es la importancia de un festival de Cine en la ciudad?
Hoy es fundamental recuperar el espacio público generando espacios de encuentro ciudadano, que nos inviten a imaginar mejores maneras de convivencia con nuestros semejantes humanos, no humanos, y la madre tierra. En el fondo aprovechar el potencial reflexivo del arte para ayudarnos a comprender las problemáticas que nos atraviesan como sociedad y las potenciales formas para abordarlas. El cine y particularmente el cine documental genera empatía y en una sociedad tan atomizada por el individualismo, puede ser un espacio para ampliar y diluir nuestros límites abrazando la complejidad y diversidad inherente a la experiencia humana contemporánea.
¿Qué repercusión tiene para esta ciudad?
El primer impacto es la mejora en la calidad de vida en nuestra región y ciudad. Somos unos convencidos de que el acceso a la cultura colabora en el incremento del bienestar social, es por eso que trabajamos sistemáticamente en la democratización del acceso al cine entre públicos que por lo general han estado excluidos del arte y la cultura. También consideramos que nuestro festival potencia y pone en vitrina este territorio en el contexto sudamericano y mundial, desde una plataforma única que está en el desierto más árido del mundo, en espacio transfronterizo con Perú y Bolivia, y que nos relaciona con una masa crítica específica que no es habitual en los públicos que se relacionan con Arica y Parinacota. Por otra parte, cuando hablamos de calidad de vida es un concepto que no solamente puede asociarse a recursos económicos o más edificaciones, esto tiene que complementarse con espacios de ocio y ciudadanía que AricaDoc lo entrega con creces.
¿Cómo se logra llevar a cabo un festival como este?
Hay muchos aportes y esfuerzos privados y personales, pero, sin duda, esto no sería posible sin los aportes estatales que han sido estratégicos para dar continuidad al trabajo. Destacamos en este sentido el Programa de Apoyo a Organizaciones Culturales Colaboradoras (PAOCC) del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, el cual ha resultado clave para nuestra organización. Destacando además el apoyo fuerte y decidido de la Ilustre Municipalidad de Arica. Destacó también el compromiso del colectivo humano que año a año trabaja activamente en que Aricadoc sea cada vez un evento más significativo y memorable para la comunidad regional
¿Qué es AricaDoc?
AricaDoc es más que Festival Internacional de Cine, sino que es principalmente un programa de acción y mediación cultural que funciona los 12 meses del año y que, mediante las herramientas expresivas del cine documental y la realización semanal de cine foros y talleres de creación, promueve la activación y bienestar cultural en comunidades urbanas y rurales del desierto, esto con el objetivo de recuperar el espacio público, democratizar el acceso al cine e incrementar el bienestar cultural de quienes por diferentes motivos ha estado excluidos del acceso al arte y la cultura, generando así nuevos públicos para el cine documental.
¿Cuál es la evaluación que hace a lo largo de todos estos años sobre AricaDoc?
Hay varias cosas que se pueden destacar, pero principalmente es que Arica y Parinacota tienen un espacio preferencial para acceder al cine documental, una vitrina que ya está afianzada, con un público cautivo que espera y participa activamente de los diversos espacios que realizamos durante el año. Actualmente somos el único festival de cine documental del Norte Grande. Todos los años se incrementa la cantidad de directoras y directores de todo el planeta interesados por presentar sus obras en nuestro festival, lo cual demuestra cómo el festival ha posicionado a nuestra ciudad en los circuitos globales de la creación y distribución cinematográfica. Lo cual sumado a nuestro foco comunitario, nos ha permitido consolidarnos en un evento que complementa la relevancia creativa con un profundo compromiso de transformación social.