Más de 80 niños de sectores rurales de la provincia de Arica disfrutaron de una refrescante cascada de espuma a la que no se resistieron los consejeros regionales Jorge Díaz (Presidente del CORE), y Diego Paco, quienes, juntos a los menores, festejaron el momento, en el marco de la actividad programada en la unidad vecinal 56 de Cerro Sombrero, con motivo del proyecto “Navidad participativa intercultural niños y niñas comunas rurales”.
“Y hoy los niños rurales tienen su navidad, distinta y con sentido, y estamos con aquellos grupos que difícilmente hubieran celebrado esta navidad de una manera diferente”, resaltó Díaz.
“Y estoy feliz porque con ellos festejamos el hecho de que se realice por primera vez un evento de esta magnitud en un sector rural”, agregó Paco.
La iniciativa forma parte de una secuencia regional que consideró “Deporte inclusivo acuático”, “Olimpiadas inclusivas”, “Primera Navidad participativa cultural adultos mayores de Parinacota”, “Segunda Navidad cultural infantil”, financiadas con fondos de asignación directa, aprobados por el CORE -80 millones 253 mil pesos del 6 % FNDR- tras la presentación que hicieron efectivo profesionales del Gobierno Regional (GORE).
“Ha sido muy entretenido y divertido todo”, expresaron al unísono las hermanitas Catalina y Paulet, provenientes del Valle de Lluta.
Principalmente fueron los padres quienes destacaron el hecho de que fueran considerados los niños del ámbito rural, resaltando el criterio de las autoridades regionales en torno a descentralizar las festividades de fin de año, que hasta el año 2018 se centraron en el área urbana de Arica.
“Y encuentro bien que se esté haciendo algo acá porque nunca se había hecho algo así”, destacó José Miguel Benavides, de Azapa; “y es fantástico esta actividad, es una recreación para los niños”, agregó Herminia Villalobos de Cuesta del Águila; “y para los menores tiene un gran significado, ya que viven en un ambiente en donde no hay mucha gente, niños, y viven en parcelas, retirados unos de otros y acá comparten todos juntos con sus respectivas familias” concluyó Marta Díaz, Educadora de Párvulos
En esta oportunidad fueron considerados talleres de cerámica, folklor y pintura, a las que se agregaron las infaltables caritas pintadas, juegos como toboganes y camas elásticas, que fueron el deleite de los pequeños junto a sus padres.