Continuando con las fiscalizaciones en locales de expendio de bebidas alcohólicas, la Municipalidad de Arica, a través de la Dirección de Prevención y Seguridad Humana (DIPRESEH) comenzó las visitas sorpresas a los distintos supermercados de la ciudad, los cuales también se ven afectados por la modificación a la ordenanza para restringir el horario de venta de estos productos.
Tres equipos conformados por inspectores municipales, funcionarios de DIPRESEH y Carabineros, iniciaron las rondas aleatorias el pasado jueves, cubriendo los sectores de Cerro La Cruz, el Centro y la Costanera hasta la población Silva Henríquez. El trabajo ha sido considerado positivo en cuanto a que la gran mayoría de los comercios han respetado la medida, que establece como horarios de venta entre las 10:00 y las 18:00 de lunes a viernes, y de 10:00 a 15:00 horas los fines de semana y festivos.
El alcalde de Arica, Gerardo Espíndola Rojas, señaló que la medida no sólo afecta a los locales de barrio y a las micro empresas, por lo que es igual de importante vigilar el funcionamiento de grandes recintos como los supermercados, los cuales siguen atendiendo más allá de los horarios de restricción por cuanto pueden seguir vendiendo otros productos.
“Hemos tenido buenos resultados, la gente se ha portado bastante bien. Nuestros equipos de inspectores, de Seguridad Humana y Carabineros han estado fiscalizando en diferentes días y momentos, y las botillerías se han portado bastante bien, lo que demuestra que los pequeños locatarios tienen el compromiso de cumplir con esto y son un aporte para la ciudad en medio de la pandemia que ha azotado a Arica”, explicó el jefe comunal.
Sólo unas cuantas multas
A la fecha, sólo cuatro multas han sido cursadas por los equipos de inspección: Una por venta fuera de horario, dos por no contar con la patente al momento de la fiscalización y otra por tener el alcohol a la vista.
Las rondas no sólo apuntan a buscar infractores de la normativa, sino también educar a los comerciantes para no cometer errores. En este sentido, igual de importante que respetar los horarios, es tener los productos cubiertos ya que no pueden ser publicitados en horas de no venta.
La restricción horaria de venta de bebidas alcohólicas fue adoptada para evitar problemáticas generadas por la crisis sanitaria provocada por el Covid-19. Entre ellas destacan el aumento en los casos de violencia intrafamiliar, provocados en muchos casos por el excesivo consumo de alcohol. A su vez, las fiscalizaciones realizadas por personal de Ejército han dado con muchas personas bebiendo alcohol en la vía pública, tanto en tiempo de cuarentena como en el toque de queda que inicia a las 22:00 horas.