En las próximas semanas el emprendedor Detlef Krause Lolas firmará uno de los acuerdos más importantes de su carrera y que lo ligará como asesor técnico de Oxford para la fabricación de bicicletas eléctricas.
Todo un hito si se considera que Detlef es administrador hotelero de profesión, pero un autodidacta que lo ha llevado a ver que el uso de energías renovables es el presente para la electromovilidad.
Este sanfelipeño de nacimiento y que estudió en Viña del Mar, reconoció que es un “ariqueño adoptado” luego que desde los 12 años de edad visitara nuestra ciudad todos los veranos para acompañar a su padre, quien era dueño del Hotel Las Vicuñas de Putre.
Pero en 1998 se viene definitivamente a vivir a Arica, donde posteriormente se casó. “Una vez que logré titularme de administración hotelera me vine a trabajar en el hotel y en una agencia de viaje que teníamos en Arica”, dijo hasta que el 2010 se compra una parcela en Azapa.
Es aquí cuando comienza su nexo con la energía solar, porque se dio cuenta que la casa no estaba conectada a la red eléctrica y realizar una postación eléctrica era de alto costo. Así conoce a quien sería su mentor, el ingeniero electrónico Oscar Ahumada.
Éste le aconseja que instale energía solar. “¿Pero funcionará?”, fue la primera pregunta que se le vino a la cabeza. “Comenzamos a instalar paneles y a medida que avanza el trabajo me doy cuenta que es espectacular, naciendo en mí una fascinación con este tema del uso de energías renovables”.
Partió con lo básico, un par de paneles y baterías. Y a medida que fue teniendo recursos se fue ampliando la cobertura de toda la vivienda.
En el proceso se dio cuenta que funcionaba bien, incluso permitiéndole tener excedentes de energía, lo que lo lleva a pensar en construir un auto eléctrico. Estudia el tema a través de un curso online de electromovilidad.
“El primer auto lo tuve hasta que las baterías murieron. Después decido hacer una moto eléctrica para evitar la congestión vehicular de Azapa”, comentó al explicar que en paralelo el tema del litio va tomando fuerza en nuestro país, “aunque su tratamiento te exige ser más responsable con las cargas y descargas a diferencia de lo que sucede con las baterías de gel o plomo”, advirtió.
Una vez que la moto y el auto es probado en público en el autódromo de Arica, llega a Corfo para solicitar apoyo.
De esta manera postula el 2016 a la línea de Prototipos de Innovación Regional (PIRE) para transformar en eléctricos un furgón de 8 pasajeros y una moto, y la habilitación de una estación de recarga.
“Esta oportunidad me permite aprender el desarrollo y uso del litio, por lo que postulo y me gano el subsidio. Para mejorar mi proyecto sumo a Oscar Ahumada, quien accede”, contó al agregar que toma otro curso online para certificarse como instalador para transformar vehículos en eléctricos e híbridos a través de una empresa uruguaya y una universidad mexicana.
Con el recurso de Corfo compró pilas de litio para fabricar bancos de baterías, obligándolo a aprender toda la electrónica para protegerlas en las cargas y descargas durante el desarrollo de los prototipos. “La autonomía programada fue superada con creces. Así para el furgón de 65 kilómetros se llegó a 80 kilómetros por carga, y la moto superó los 100 kilómetros de los 70 proyectados”, resaltó.
Con el manejo total de esta nueva tecnología, Detlef se la juega por trabajar con bicicletas, tema que estaba fuera del proyecto Corfo. “Como ya sabía hacer pilas y fabricarlas para autos y motos, me di cuenta que podía hacerlo para bicicletas, cuya autonomía alcanza los 60 kilómetros con asistencia del pedaleo”, subrayó.
De esta manera decide vender bicicletas eléctricas, considerando el alto costo de transformar en eléctricos autos y motos.
En este proceso comienzan a aparecer posibles financistas.
Hace el nexo con Bicicletas Oxford a través de su dueño, quien viaja hasta Arica para probar las bicicletas junto a su gerente general y jefa de retail. “Me llamaron que querían visitar mi taller, por lo que vinieron a probar mis prototipos. Salieron a dar una vuelta mientras los esperábamos con la jefa del retail. Y en vista que se demoraban más de la cuenta creí que las bicicletas no habían funcionado o se quemaron. Pero 15 minutos después llegaron y me señalaron que el producto era genial”.
Así el convenio consistirá en que Detlef asesorará técnicamente la fabricación de una línea de bicicletas eléctricas, e-bike, a través del Departamento de Venta, al Servicio Post Venta y al Departamento Técnico. “Y a pesar que en Chile existen 5 marcas que cuentan con este tipo de producto, la diferencia está en que no entregan un servicio posterior a la venta al que ofreceremos con Oxford, es decir, un servicio post venta de calidad”.
Pero eso no es todo, porque se ha reunido con inversionistas locales para fabricar completamente una moto eléctrica “Made in Arica”, lo que podría ver la luz antes de fines de año, con precios al alcance de todos con un producto que andará 100 kilómetros, con una velocidad de 100 kilómetros y 100% ecológica.