En Arica , al igual que en 21 ciudades del país se llevaron a cabo el pasado viernes marchas convocadas por el movimiento Fridays For Future, que busca crear conciencia sobre el cambio climático y sus consecuencias.
Firmar el Acuerdo de Escazú, derogar el Código de Aguas, proteger el bosque nativo y erradicar las centrales termoeléctricas a carbón para el año 2030 fueron las demandas centrales que marcaron la manifestación.
La vocera del movimiento en Arica, al igual que dirigentes de ONG adherentes, detallaron los objetivos y demandas que sustentaron esta manifestación a lo largo del país, valorando el carácter multitudinario de la movilización.
“Y estamos contentos con todos mis compañeros, ya que el resultado de esta marcha es superior a las anteriores dos que realizamos, lo que significa que el movimiento va creciendo, por lo que estamos orgullosos como jóvenes, porque habla del valor que tuvimos para dar este paso, ya que demostramos que nos interesan los problemas medioambientales”, resaltó Pamela Giordano.
“Estamos hace más de 14 años generando conciencia por el tema medioambiental, y en esta oportunidad estamos apoyando esta causa, encabezada por jóvenes de todo el mundo”, concluyó Francisco Wilson, presidente de ONG Borde Rio.
Llamo la atención la gran cantidad de letreros hechos con cartones, una batucada y sólo dos de autoridades que han hecho parte de sus actividades el compromiso medioambiental, el consejero regional Claudio Huerta y el concejal Luis Malla.
“Han sido más de 5.000 eventos en el mundo, los que hacen mucho para decir basta con lo que hoy está pasando en el mundo”, resaltó Huerta.
“Y no hemos reparado en lo que hablaron en la ONU los representantes de las 16 empresas que controlan los combustibles fósiles en el mundo, quienes no están dispuesto a retroceder en la exploración explotación y producción de estos”, agregó Félix Sebastián, Biólogo.
La convocatoria ariqueña, como a nivel global, tuvo por objeto cerrar una semana donde tuvieron lugar eventos multitudinarios con un llamado a los Gobiernos para reconocer la emergencia climática como una prioridad mundial.
