Solo seis años tiene un niño rescatado por la PDI Arica, luego que su madre, una ciudadana boliviana, lo dejara encerrado con candado, en una precaria habitación de los faldeos del Morro. Tras ingresar al lugar, la policía halló comida en proceso de descomposición, una bacinica y cajas de fósforos ubicadas al alcance del niño.
La denuncia de una vecina permitió a la PDI poner fin a un caso de abandono, originado en el seno de una familia con una mujer sin empleo y un hombre recluido en Acha.
Según su propio testimonio a la policía, la mujer de 35 años de edad habría hecho aquello para salir con cierta holgura a realizar un trabajo temporal que permitiera paliar su falta de empleo permanente.
El menor, quien cursa el nivel de kínder, fue encontrado en un estrecho dormitorio de material ligero, ubicado dentro de una propiedad que la madre arrienda, en los empinados declives de calle El Morro, arteria que corre en paralelo al macizo.
Las indagatorias determinaron que el niño estuvo completamente solo en al menos dos ocasiones, pero en una de ellas el horario de abandono llegó a extenderse desde las 14 hasta a las 21 horas.
La mujer habría dejado a su hijo para ayudar a una persona a mudarse de domicilio, actividad por la que recibiría un pago a cambio.
A la falta de trabajo de la extranjera se suma la situación del padre del niño, quien purga una condena por tráfico de drogas en la cárcel de Acha.
El menor fue internado en el Centro Conin de Arica por instrucciones del Juzgado de Familia. Por otro lado, la madre, quien en un comienzo había sido detenida por el delito de abandono, recuperó su libertad por orden de la Fiscalía, pero deberá comparecer.