La Policía de Investigaciones detuvo a la salida sur de Arica a una mujer de 28 años de edad, pasajera de un bus contratista de la minería, que intentó botar en el baño de la máquina una droga que llevaba oculta entre sus ropas.
El plan de la mujer fracasó porque el sanitario se encontraba ocupado, por lo que se conformó con arrojar la sustancia bajo su asiento.
Los movimientos de la pasajera habían sido advertidos por detectives de Antinarcóticos que en esos momentos revisaban el bus, puesto que el ejemplar canino detector de drogas “Samael”, había dado una alerta positiva sobre la mujer ante la presencia de sustancias prohibidas.
El hecho se registró en la localidad de Cuya, límite entre las regiones de Arica y Parinacota y Tarapacá, donde la PDI cuenta con un control antinarcóticos permanente para la revisión de los vehículos que se dirigen al sur del país.
La imputada iba a bordo de un bus contratista de la minería que se dirigía de Arica a Calama con cerca de 30 trabajadores de una empresa proveedora de servicios de alimentación.
La mujer portaba casi cien dosis de cannabis en dos contenedores cilíndricos, por lo que la Fiscalía ordenó su traslado al Juzgado de Garantía de Arica, en tanto, el bus continuó su viaje a la Región de Antofagasta.