El Consejero Roberto Erpel anunció que llevará el caso del Parque Chapiquiña a la Contraloría, señaló estar cansado de explicaciones entre jefaturas de diversas reparticiones públicas, que dejan de manifiesto que las obras – que son parte del plan de mitigación por la contaminación de polimetales en el sector – fueron entregadas sin terminaciones y con graves falencias. El Consejero Regional, decidió poner en conocimiento de la Contraloría Regional el caso, para que tome cartas en el asunto, más aun cuando hay $ 1.600 millones de pesos de por medio, y en donde hay labores que no fueron bien ejecutadas.
En las últimas horas, efectuó un seguimiento en torno a que si las obras, supuestamente terminadas, habían sido entregadas al municipio, para su mantención, encontrándose con la novedad de que no hay documentación al respecto.
Pero no es todo, en el programa de mitigación, estaba la remoción del suelo contaminado, el que no fue ejecutado, y que acusa una plaga de garrapatas que ya ha causado la muerte de varias mascotas, como también estar afectando a familias de las viviendas contiguas al mencionado parque.
Debido a estas falencias, es que decidió llevar el caso a la Contraloría Regional “porque es preocupante que una inversión millonaria, que dice relación a mitigación, que significa mejorar la calidad de vida a las personas se encuentre en estas condiciones (…) yo voy a presentar los antecedentes a la contraloría para la verificación de que la inversión que se tuvo que haber realizado se debió hacer a cabalidad”.
Para la vecina y expresidenta de la Junta de Vecinos Sica Sica, Rosa Reyes, las obras en el citado parque son una burla, en la que todas las autoridades, cual mas cual menos, tienen la responsabilidad.
“Yo estoy indignadísima, porque acá las autoridades se han burlado de nosotros, y porque ¿por qué vivimos en una población? Mis hijas, mis nietas que se criaron acá, tuvieron que irse porque están contaminadas con plomo, y más aún poner sobre la tierra contaminada, arena, y sobre esta , juego infantiles, y lo más terrible es que han proliferado las plagas, ahora, sumado a las baratas, las garrapatas ”, recalcó Reyes.
Las obras, que tuvieron un valor de $ 1.600 millones de pesos -con fondos sectoriales- abarcaron una superficie de 12 mil mts2, comenzaron a ejecutarse el primer trimestre del 2015, como mitigación por estar en torno al sitio F, las que fueron visitadas profusamente por autoridades del nivel central.
Las labores las ejecutó la Empresa Constructora Grupo Norte, y algunas de estas, como la colocación de gravilla, no existen, solo arena; especies vegetales que deberían haber sido regadas no tienen suministro de agua, pese a que está instalado un sistema de riego por goteo; el tratamiento de la tierra al parecer ha sido estéril, pues han proliferado plagas de insectos; además de que hay temor de que aun persista la contaminación por polimetales, debido a que no todo el material fue sacado.