La jefa de carrera de Técnico en Educación Parvularia del Centro de Formación Técnica Santo Tomás Francis Gálvez Heredia, entregó algunas recomendaciones para el período de adaptación del primer nivel de educación.
Muchas familias, tienen ciertas aprensiones a este período, ¿La razón? El proceso de adaptación de los niños y niñas para su primer día de jardín, incluso si cambia de nivel, luego de unas largas vacaciones.
Esta etapa, tanto para los párvulos como para sus familias, conlleva un período de adaptación, siendo muchas veces es complejo para ellos, debido a los importantes cambios que experimentan, como, por ejemplo; relacionarse con sus pares y también con los agentes educativos que estarán al cuidado de ellos.
Francis Galvez, jefa de la carrera Técnico en Educación Parvularia del CFT Santo Tomás expresa que “en este escenario, y especialmente los niños y niñas que asisten por primera vez al jardín infantil y sala cuna, expresan su ansiedad al desapego de diferentes maneras, como mostrar de forma frecuente la angustia a través del llanto, en distintas situaciones, como, por ejemplo; al vestirse o al llegar al establecimiento educativo, ya que suelen aferrarse al adulto significativo que los acompaña al momento de tener que separarse”.
Estas reacciones son esperables en ellos y suelen disminuir luego de algunos días y semanas, en la medida que la rutina se vuelve habitual, se van sintiendo más seguros, cabe mencionar que cada niño (a) es único, y por tanto tienen distintos tiempos de adaptación.
¿Cómo ayudar a nuestros niños?
“Es de suma importancia que en este período, como adultos seamos especialmente cariñosos y aceptemos lo que sienten, mantener siempre una actitud tranquilizadora, y de respeto hacia sus emociones, ya que si nos ven angustiados, nuestros niños y niñas lo perciben y no se sentirán seguros para quedarse en el jardín infantil o sala cuna , el mantener un diálogo sobre la experiencia que está por comenzar, sobre donde irán, con quienes van a jugar, quienes estarán al cuidado de él o ella, ayuda mucho a bajar los niveles de ansiedad”, aconseja la educadora.
Además, entregó algunas recomendaciones que pueden ayudar al proceso de adaptación de los niños y niñas:
- Familiarizarlos con el horario antes del ingreso a clases, acostarlos más temprano para que puedan cumplir con las horas de sueño recomendadas.
- Conocer antes del ingreso a clases su nuevo establecimiento educacional, para que una vez que ingrese, ya se haya generado algún vínculo con el espacio físico y no posea sensación de inseguridad.
- Hablarle de su nueva experiencia, y hacerlo parte del proceso, ya sea durante las compras de útiles escolares y/o uniforme, o mientras se ordenan los mismos, explicándole las experiencias positivas, generando un interés por asistir al jardín infantil o la escuela.
- Generar una rutina con días y horarios, permitiéndoles que puedan bajar su nivel de ansiedad, ya que pueden organizarse como familia.
- Generar una comunicación fluida, priorizando la escucha por medio de la expresión del niño o niña, generando preguntas de tipo no invasivas, respetando sus tiempos de comunicación.
“Es relevante destacar, que el periodo de adaptación no sólo es para los niños y niñas, sino que también para el equipo pedagógico, ya que tiene el primer acercamiento con sus nuevos estudiantes y sus familias, por lo que en esta etapa inicial es clave mantener una comunicación constante entre agentes educativos y familia, generando propuestas e ideas en torno a actividades y aprendizajes”, finalizó la jefa de carrera de Técnico en Educación Parvularia.
