Por seis años y desde cuando la víctima tenía 9 años, vivió la pesadilla de ser abusada por su padrastro, quien bajo amenazas, aprovechaba de cometer los delitos cuando quedaban a solas.
En el Tribunal de Garantía, el Fiscal Luis Soriano expuso el crudo relato de la menor que contó los detalles de los abusos “Desde que la menor tenía 9 años, en el 2009 y hasta el 2015, el imputado Juan Lovera Blanco, conviviente de la madre de la víctima y cuando vivían en una media agua, aprovechaba en circunstancias de quedarse a solas con la menor, para ingresar a la habitación de la víctima…. Donde realizaba actos de connotación sexual”.
Soriano indicó que “estos hechos ocurrieron en los años 2010, 2011, 2012, y 2013 y cuando comienza el año 2014 en marzo, empieza derechamente a violarla bajo amenazas de no contarle a nadie lo ocurrido, porque su mamá le iba a pegar, además que nadie le iba a creer… Los últimos episodios ocurren hasta febrero del 2015” señaló.
El 4 de marzo del 2015, la madre de la víctima, ya en conocimiento de los hechos, procede a estampar la denuncia y encara a Lovera, huyendo el agresor del lugar.
Bajo la imputación de los delitos de abusos sexuales de carácter impropios, reiterados y consumados, además del delito de violación reiterada y consumada, el fiscal solicita la prisión preventiva del imputado.
Después de un año y cuatro meses, el agresor es detenido
Desde que se realizó la denuncia y el imputado huyó, pasó un año y cuatro meses, hasta que ayer y en circunstancias que el imputado iba al domicilio de la madre y la menor, la PDI montó un operativo para su captura.
La sub comisario de la Brisexme, Leticia Saldivia Maluenda explica, que ayer detuvieron al imputado, pues apenas se realizó la denuncia el agresor huyó. Saldivia señaló que se agregó una dificultad adicional al procedimiento de búsqueda, ya que el imputado mantenía una identidad falsa; como Juan López Blanco, identidad con la que fue enrolado, cuando cumplió una condena de 8 años, por tráfico, en la cárcel de Acha, en el año 1997.
Ante todos los antecedentes expuertos por el fiscal, el peligro para la víctima y la inminente fuga, el Juez Juan Araya, decretó la prisión preventiva para el imputado, determinando 60 días para realizar la investigación.
