El objetivo del intenso trabajo en el km 15 es evitar que aquellos desperdicios lleguen a las playas tras la bajada del río.
Una imagen dantesca se pudo apreciar en el kilómetro 15 del valle de Azapa, específicamente en un cruce no habilitado por el lecho del río San José. Toneladas y toneladas de basura convertían el espacio en un vertedero ilegal, con desperdicios que en su gran mayoría correspondían a desechos agrícolas y botellas de vidrio.
Por tal motivo, los equipos de la Dirección de Medio Ambiente, Aseo y Ornato y el Departamento de Gestión Ambiental arribaron al lugar para realizar el operativo de limpieza del lecho más importante hasta la fecha, apoyados por toda la maquinaria pesada de la Municipalidad de Arica.
El hedor, la podredumbre, los roedores y las moscas hacían la labor de los funcionarios municipales casi imposible. Sin embargo, con la tarea de evitar que todo ese desecho llegase al mar, lograron trasladar gran parte de la basura al vertedero, en una labor que se extenderá por varios días dado el tamaño del problema.
El director de Medio Ambiente, Aseo y Ornato, Marcos Gutiérrez, señaló en la ocasión que “estamos súper decepcionados con la gente que vive acá en este sector. Este no es un microvertedero, es un vertedero que se ha ido formando con los años, irresponsablemente por parceleros que trabajan acá y que no son capaces de poner un camión a disposición y ellos sacar esta basura o ir con sus vehículos al vertedero”.
20 focos aislados
Gracias al apoyo de la Dirección de Desarrollo Rural, el departamento de Gestión Ambiental catastró 20 acopios aislados de basura a lo largo de los 50 kilómetros del San José, de los cuales tres toman prioridad por el tamaño y por logística.
El encargado del área, Luciano Sánchez, explicó que, aunque las intenciones por limpiar algunos espacios están, el trasladar la maquinaria hasta rincones tan aislados hace prácticamente imposible poder limpiar la parte alta del lecho, por lo que se hace urgente apelar a la conciencia de los agricultores y habitantes del valle.
“Desde la Dirección de Desarrollo Rural se hizo un levantamiento y nosotros también apoyamos como Medio Ambiente, donde detectamos 20 focos aislados, algunos de mayor envergadura y siendo este el mayor. No nos da la logística ni las capacidades para abordar todo el río San José. Por ende, es necesario apelar a la conciencia y al sentido común de los vecinos para evitar que se generen estos microvertederos”.
Desde principios de noviembre, la Municipalidad de Arica ha realizado operativos de limpieza a lo largo del lecho del San José, debido a que el año pasado las lluvias estivales se adelantaron a la época habitual. Si bien los funcionarios trabajan a toda máquina, se hace imperioso que la propia comunidad tome conciencia, ya que todos estos desperdicios terminarán eventualmente en playa Chinchorro, no solo afectando turísticamente a la ciudad sino también exponiendo a sus habitantes a un riesgo sanitario grave
