Hoteles Sol de Arica y Avenida participaron activamente de este valioso ensayo, que les permite estar preparados ante la eventualidad de una catástrofe natural.
Un terremoto de 7,7 grados en la escala de Richter, con epicentro a 40 kilómetros de Arica, al suroeste de Cuya, se registró a las 14:10 horas.
Bajo estas condiciones se realizaron simulacros en las dependencias de los hoteles Sol de Arica y Avenida, actividades que forman parte del programa PROFO +Destinos que presta asistencia técnica a establecimientos de alojamiento turístico con el apoyo de Cordenor y el cofinanciamiento de Corfo.
Ambos ejercicios fueron supervisados por Juan Reyes Arancibia, evaluador Gestión del Riesgo, quien destacó la alta participación de los huéspedes como también del personal de estos recintos de alojamiento, quienes cumplieron con los protocolos como salir de sus oficinas y habitaciones para dirigirse a la zona de seguridad.
“Ambos simulacros fueron didácticos y muy participativos, ya que tanto trabajadores como huéspedes se mostraron llanos a seguir el plan de emergencia que tenía cada uno de los hoteles. Lo destacable es que se mostraron estar preparados para reaccionar ante un siniestro de estas características”, comentó Reyes.
Osvaldo Abdala, director regional de Corfo, se refirió al programa de gestión del riesgo que desarrolla el Profo +Destinos. “Es de gran ayuda para el turismo, ya que permite que los recintos de alojamiento de la región estén preparados para asegurar a sus huéspedes y personal ante la ocurrencia de una catástrofe natural”.
En tanto, Jorge Aragón, gerente de Hotel Sol de Arica, quedó conforme al ver cómo su personal demostró competencias ante una emergencia. “Fue positivo para nosotros como hotel este simulacro, ya que nos permitió comprobar cómo estamos preparados ante cualquier eventualidad para brindar seguridad a nuestros alojados y mejorar aquellos aspectos que podrían marcar la diferencia”
