“Apacheta” y “Pepita”, son las dos nuevas tortugas liberadas en Playa Chinchorro con transmisores satelitales en su caparazón, los que permitirán conocer comportamiento.
Esta iniciativa se enmarca en el proyecto denominado “Programa de Conservación de Tortugas Marinas en la Región de Arica y Parinacota y su potencial para el desarrollo de actividades de turismo de intereses especiales”, financiado por el Gobierno Regional y liderado por el académico Walter Sielfeld y su equipo de la Universidad Arturo Prat.
Según explicó Sielfeld, “Arica es el único lugar del Pacífico Sur Oriental donde hay tortugas marinas en forma permanente y durante todo el año” en este contexto es un privilegio tener a estos ejemplares tan cerca y con una población relativamente masiva en las costas de Arica, tanto para su estudio, como potencial turístico de intereses especiales.
la actividad de marcaje satelital se realizó entre los días 24 y 25 de julio y consistió en instalar en las tortugas transmisores satelitales con el propósito de conocer cómo utilizan la bahía de Arica, las rutas de migración, zonas de alimentación y los destinos para postura de huevos.
“A la fecha hemos instalado tres transmisores. Dos tortugas se mantienen en Arica y una ha iniciado su migración al norte, estando actualmente a la altura de Pisco, en Perú. Suponemos que va rumbo a Galápagos. Toda la información que recojamos a través de estos dispositivos nos proporcionará datos relevantes para desarrollar un plan estratégico de protección de las tortugas”, señaló Sielfeld.
Agregó que también en el marco del programa mensualmente realizan un registro de individuos, tarea que incluye la marcación con números de metal en las aletas, establecer peso, medidas, características físicas, toma de muestra de tejido para análisis de ADN y liberación.
Por su parte, la autoridad zonal de SUBPESCA, Marco Soto, indicó que esta “iniciativa entregará importantes antecedentes para conocer de mejor forma la población de tortugas de playa Chinchorro y, por otro lado, obtendremos valiosa información para proponer los límites de la zona de protección que estamos gestionando en el marco de la mesa regional de esta especie”.
Finalmente y alrededor de las 02 de la madrugada del día 25 de julio fueron devueltas al mar dos hermosos ejemplares; “Pepita” y “Apacheta”, con los transmisores en su caparazón, los que empezaron a transmitir su señal inmediatamente al tocar el agua.