Llene de color y aroma su casa con esta pequeña guía para crear huertos caseros. Considerando que en Arica es vital el ahorro del agua, INDAP le enseña a cuidar este recurso, usando el agua de enjuague del lavado de la loza.
Si usted es de los que siempre ha soñado con tener un huerto en macetas en su casa, pero no sabe por dónde empezar, siga las sencillas instrucciones que nos entrega Claudio Dinamarca, ingeniero en ejecución agrícola con mención en zonas áridas y jefe de Asistencia Financiera de Indap Arica y Parinacota.
LA UBICACIÓN DEL HUERTO.
“Para comenzar, hay 2 factores claves que debemos tener en cuenta a la hora de elegir el lugar donde ubicaremos nuestro huerto, que son el sol y el agua”, explicó Dinamarca.
- Lo primero que tenemos que organizar es el espacio que disponemos para ubicar nuestro huerto. “Independientemente de que sea amplio o reducido, debemos elegir un lugar soleado, ya que nuestras plantas necesitarán un número considerable de horas de luz para madurar”, especifica.
- Por otro lado, las plantas necesitan ser regadas periódicamente, por lo que es importante tener una toma de agua cerca.
- Recipientes de cultivo: “Podemos usar macetas o jardineras rectangulares, del tamaño que más nos acomode, para apoyarlas en las ventanas o en balcones. Usualmente sirven para cultivar plantas medicinales, hortalizas y verduras en lugar de flores, y así obtener nuestra propia cosecha”, puntualizó el profesional.
- Jardinera vertical: Si tenemos poco espacio, esta es una solución perfecta para disponer de un pequeño huerto, por ejemplo de plantas aromáticas en nuestra cocina. “Como las jardineras están dispuestas una encima de otra, reducen el espacio que ocupan”, dijo.
Para esto se necesita de una base adosada a una pared, idealmente de madera, donde se puedan colgar las jardineras, una sobre otra, como peldaños de una escalera.
- Sustratos: Podemos usar fibra de coco o humus de lombriz. Según explicó Claudio Dinamarca, la elección de un buen sustrato es fundamental para el buen crecimiento de nuestras plantas. “Recomendamos emplear una mezcla de tierra de hoja, fibra de coco y humus de lombriz. La fibra de coco es un sustrato orgánico que aporta esponjosidad al sustrato. El humus de lombriz, por su parte, aporta una gran cantidad de nutrientes a nuestras plantas. Se trata además de sustratos ligeros, lo que es importante para no sobrecargar de peso nuestros balcones y ventanas”, indicó.
- El riego: Nuestras plantas necesitan agua durante todo su crecimiento, pero sobre todo en los meses de calor. Si las macetas son pequeñas, se puede regar simplemente con una regadera cada dos días; pero si se quiere automatizar el riego para que sea más cómodo, una buena idea es llenar una botella de plástico con agua, hacerle un pequeño orificio en la tapa, colgarla o apoyarla boca abajo sobre la maceta a una distancia de unos 3 centímetros de la tierra y dejar que el agua vaya cayendo gota a gota. Cuando se vacíe sólo hay que rellenar. No olvide que también puede usar el agua del enjuague de la loza, que no tenga detergente.
- Respecto a las semillas, es importante elegir semillas de buena calidad, “idealmente de variedades locales, que se adapten a nuestro clima, donde los días son más largos que las noches”, puntualizó Dinamarca. Entre las de mejor crecimiento para esta zona destacó las espinacas, lechugas, hierba luisa, hierba buena, romero, lavanda, cilantro, albahaca, perejil, ciboulette, ajíes, ajos, cebollas y cebollín.
- Para conseguir todos estos insumos, Dinamarca recomienda acercarse a los distribuidores de productos agrícolas de la ciudad, los productores de humus de lombriz del Río San José, y los vendedores de tierra de hoja en el Valle de Azapa.
“Sin embargo, no hay nada mejor que un compost casero, fabricado con nuestros propios desechos orgánicos, como cáscaras de verduras, frutas y huevos; frutas en descomposición y rastrojos de podas (…) con esto no sólo ayudamos al cuidado del medio ambiente sino que les damos una excelente lección a nuestros niños”, concluyó el profesional.
- ¡A disfrutar de su huerto!